Carnicerías: por qué las ofertas son de “contado efectivo”

Durante el último año, se multiplicaron las carnicerías que anuncian sus programas de “ofertas” con rebajas significativas, que en algunos casos llegan al 30 % del valor habitual de la mercadería. Muy tentadoras para una clientela que cada vez camina más para conseguir precios acordes a su presupuesto. Pero eso sí, tienen una única condición: hay que pagar de “contado efectivo”, como les gusta decir a los cajeros.

Son muchos los que llegan al lugar de pago y se encuentran con la sorpresa de que el precio ofrecido no corre si se paga con tarjeta de débito. Algunos se quejan airadamente porque, en definitiva, una vez que el plástico pasó por el posnet el dinero desapareció automáticamente de su cuenta.

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Pero ese dinero que salió de la cuenta del cliente, no ingresa tan automáticamente a la del comerciante. Por eso, los vendedores exclaman que al final “el débito no es contado”. Primero, porque la acreditación a veces pueden demorarse entre tres y cinco días. A veces, hasta una semana.

El otro problema que tiene el comerciantes es que dinero que ingresa por el sistema de pago on line, queda automáticamente sujeto a todas las retenciones: “ingresos brutos, IVA, Ganancias, Anticipo de Ganancias. El banco te genera todos los descuentos que después los acumula y los reserva para pagar 30 días después”, explican.

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En los tiempos que corren, 30 días son casi un largo plazo. El banco puede utilizar esos montos para realizar sus propias operaciones. Y el comerciante piensa en términos parecidos: “el cliente tiene que pedir la factura y a fin de mes, uno tiene que pagar todos esos impuestos. Pero mientras tanto, tenemos margen para trabajar con ese dinero. Pagar a proveedores con descuentos, o invertirlo en el sistema ifnanciero, por ejemplo”, precisó.